Resistance. Fall of Men: Historia Contrafactual

Los que me conocéis ya sabéis que no puedo evitar comprarme lo último en aparatejos y rollos tecnológicos. Es una enfermedad, una adicción. Aún no he terminado de pagar el móvil y ya salibeo ante los anuncios del nuevo Nokia N95. Pero hay que ser fuerte y vencer la tentación. El caso es que soy el flamante propietario de una Playstation 3, amén de una XBOX 360, una PSP, una Nintendo DS y algunos modelos antiguos de todas estas.

El caso es que el único juego que tengo para PS3 es Resistance: Fall of Men. Quiero comprarme más, que conste, pero de momento el catalogo del monstruo de Sony no me hace demasiado tilín. A ver si empiezan a producir juegos. Este, en principio, lo compre como la opción menos mala. Los Shooters no son mi temática preferida. Pero oye, no está mal.

La cosa va de una historia alternativa. A esto, cuando estudiaba Historia en la universidad, lo llamaban Historia Contrafactual. Que hubiera pasado si...? Aquí jugamos en un escenario de la década de los 40 del siglo pasado pero sin nazis. La guerra la tendremos que librar con otro tipo de monstruos. Un extraño virus, el Quimera, invade toda Europa desde Rusia. El virus es letal y provoca que quienes se infectan se conviertan en diferentes clases de seres asquerosillos con distintos cometidos: soldado, zombie o simple bichejo. Los Quimeras no sólo son monstruos, tienen una capacidad tecnólogica muy superior a la de los aliados. Sí, aliados. El juego se desarrolla en Inglaterra pero nuestro héroe es un Yankee.

Quimera invade el Reino Unido, los esfuerzos por frenar su avance son inutiles. Y para más inri, cuando llegan los refuerzos estadounidenses caen en una emboscada. Aquí empezamos a pegar tiros. El juego cuenta la historia de un soldado americano inmune, en principio, a los efectos del virus. Nos meteremos en su piel durante tres días de su vida. Luchando, disparando y descubriendo los secretos de Quimera. Bueno, sobre todo pegando tiros.

El juego está currado. Las localizaciones son muchas y los tipos de armas que podemos utilizar también son abundantes. De vehículos se queda un poco corto, pero bueno, podemos conducir un tanque, un jeep y alguna que otra cosilla más. El modo cooperativo está muy bien, y el online tampoco se queda corto. Aunque, en general, el juego se queda por debajo de las espectativas que alguien puede tener para un PS3. Yo, personalmente esperaba más. Por poner un ejemplo: Resistance no le llega a Gears of War de 360 ni a la suela de los zapatos. Ni en diversión, ni en gráficos, ni en el cuidado por los detalles. Vamos, en nada. A esto último, y por no ser muy duro, habría que añadir que Gears of War es un juegazo lanzado cuando XBOX 360 ya llevaba más de un añito en el mercado y que Resistance es uno de los primeros lanzamientos para PS3.